Señor! Yo sí la ame, pero el destino
se opuso a nuestra dicha, fue mi suerte,
y si no me quede junto al camino
fue por llegar más pronto a la muerte.
Yo sí la ame Señor, hubo un momento
en que por ella te olvide ¿Es castigo
a ese supremo amor, cruel tormento
de que su imagen siempre este conmigo?
Perdóname Señor, si tanto he sufrido
que tengo el pecho de dolor fruncido
sin encontrar alivio a su quebranto.
Por el recuerdo de esa triste historia
perdóname Señor, por la memoria
del tiempo aquel en que la quise tanto.
del tiempo aquel en que la quise tanto.
Álbum de Poemas
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